En el pasado, para detectar la localización de un dispositivo cliente desde una aplicación web, era necesario inspeccionar la dirección IP del cliente y averiguar, usualmente mediante un servicio externo, dónde se encontraba el dispositivo. Sin embargo, junto con el HTML5, el W3C ha desarrollado un conjunto de APIs que permiten obtener la información de posicionamiento geográfico con JavaScript, desde el lado del cliente del dispositivo, es decir, un iPhone, un Android o incluso los navegadores de escritorio convencionales. La funcionalidad de estas APIs depende del grado de implementación en los navegadores web, pero actualmente la mayoría de los navegadores modernos ya están adoptando estas funcionalidades y prestan soporte nativo a la geolocalización HTML5. La API de geolocalización no identifica cómo se ha determinado la información de ubicación. Dicha información puede obtenerse vía GPS, por triangulación de antenas de telefonía o puntos de acceso Wi-FI, mediante la direcc
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